31 oct 2016

Last Summer

AÑO: 2013
DIRECTORES: Saranyoo Jiralak, Kittithat Tangsirikit, Sittisiri Mongkolsiri























Poco a poco la experiencia me va diciendo que Tailandia es un caja llena de sorpresas, tan pronto te puede venir una obra maestra de la brujería y cultura más autóctona de la región mezclada con terror (Art of the Devil 2) o bien te puede salir una cutrez ordinaria cuya único fuerte es ver cómo se contamina por las influencias norteamericanas y su “nueva ola de terror” y haciendo un copy-paste del asian horror tan cliché que todos conocemos. Last Summer entra desgraciadamente en la segunda baza.


Lo más destacable de la cinta es que está compuesta por tres directores que dirigen cada uno una parte de la historia completa, con un estilo bien diferenciado en cuanto a la idea y personajes que meten y a la par, la narrativa del arco. Esto a priori no debería sorprendernos, puesto que ya se ha visto en otras cintas como “9-9-81” o sino, la mencionada Art of the Devil 2, rodada por nada más y nada menos que por El Ronnin Team (unos 12 cineastas). De la misma forma que se dice “la unión hace la fuerza” también es aplicable “divide y vencerás”, apología que me gustaría haberle dicho al trío de artistas.

Ya que estoy hablando del tema aprovecho para decir que no es lo mismo ver una peli de terror thai que japonesa, no por nada en especial ya que ambos tratan el tema de los espíritus fantasmas y el más allá como plato de presentación, sino más bien por la marcada diferencia entre culturas. La tailandesa es mucho más arraigada con sus ancestros y tienen un pensamiento mucho más acérrimo a ello, cosa que la japonesa (por la progresiva occidentalización supongo) ha ido dejando de lado aunque sin dejar sus raíces sintoístas, claro está. Por lo que cuando le di al play me esperaba algo del calibre religioso que estoy acostumbrado a ver de su país pero no fue así, y no entiendo el por qué.

Comenzando como la típica americanada slashera refrita de vuelta y reusada por treintava vez al cubo, se mete en el cajón de los disfraces para salir de otra de las mil y una copias baratas de Sadako para al final, terminar con un drama familiar muy confuso sin pies ni cabeza. ¿Originalidad? ¿Innovación? ¿Marca de la casa? ¿Dónde, por favor? Coge arbitrariamente una escena de terror o suspense cualquier, la que tú quieras; ya se ha visto con otros actores y bajo otro nombre de película.

Parte con spoiler:

Que si los pelos que salen de la maleta, que si la fantasma toda pálida que va cobrándose venganza, que si los pelos como forma de intimidar, que si el vecino que llama al timbre cuando están liados con el muerto, la escena de la piscina, etc.

Fin de ejemplos con spoiler (aunque no creo porque es más de lo mismo).

Me duele decirlo pero no cuela, ya a estas alturas y para más inri, cuando salió la peli que fue en el 2013, no cuela poner ese tipo de terror porque ni es terror ni es nada. Y lo mismo para el drama familiar con la típica madre que no acepta la muerte de su hija y se culpa por ello y lo mismo sufre otra protagonista.

Quitando efectos especiales y banda sonora, mediocridad del montón olvidadiza.



Death Bell 2: Bloody Camp

AÑO: 2010
DIRECTOR:  Yoo Seon-dong






















Considerando el tremendo chasco que me llevé con su antecesora y viendo el gran número de gente contraria a la secuela, llevaba las expectativas bien bajas y para mi suerte me llevé una grata sorpresa.


Como bien dice la sinopsis promedio de internet, “Bloody Camp” no tiene ninguna relación con la primera película a excepción de la misma temática y la vuelta del actor cantante <Son Ho-joon> como Jeong-Beom (interpretó a Jo Beom en Death Bell). Y es que a grandes rasgos esta “secuela” o más bien spin-off, es como si hubieran cogido la idea brillante que brindaba la primera peli y la hubieran mezclado con la esencia más sádica de Saw (aspecto que ya comenté en la anterior cinta pero que aquí se utiliza bien). El resultado es una hora y media de acción survival non-stop de lo más emocionante donde desde que empieza ya te dejan las cosas bien claras: personajes principales, profesores y sus relaciones con los alumnos y la maldición de turno.

Algo que no convencía en la primera era el tema de la maldición, esa venganza por un ser querido. Aquí el director <Yoo Seon-dong> junto con el trabajo de 3 guionistas (cabe destacar la intervención de dos mujeres, como en la anterior y que se va comprendiendo cómo es una temática que bien manejan) también ofrecen una maldición vengativa pero llevada a cabo de una manera especialmente cruda y triste donde se vuelven a tomar temas usados en el K-Horror habitual, esto son la traición entre amigos de la escuela, el bullying, la falta de personalidad respecto a los estratos sociales o la reacción popular del ser humano ante una situación de vida o muerte. Todo ello relacionado con una más que notable dirección y sin dejarse cabos sueltos, por lo que indudablemente queda un peliculón 5 estrellas.

Otro aspecto positivo que hay que reconocerle al film es que a diferencia de su primogénita, la nueva no se basa en una gymkana por todo el instituto resolviendo preguntitas. Simplemente tienen que ir descifrando el grupo selecto de 20 estudiantes (bajo la misma premisa que la anterior película también) el por qué han sido escogidos, y qué tienen que hacer si quieren salir con vida de esa terrible pesadilla. Trampas mortales, gore a chorros y una historia trepidante son los tres ingredientes de esta equilibrada nueva entrega.

Un detalle interesante es el montaje de ciertas escenas que son simbólicas a lo largo de la cinta, como aquellas relacionadas con el agua y la natación (deporte ampliamente practicado en esos países asiáticos) y cómo se hicieron. Personalmente me gusta mucho disfrutar de estos making of’s y ya ni hablemos de los efectos especiales. Desde la oscura, retorcida y sudorosa atmósfera hasta las muertes y obviamente ese efecto churretoso de la sangre inundándolo todo. De 10 al equipo.

Al igual que en Death Bell, el cast está compuesto por actores y actrices muy famosos con amplios grupos de fans. Estando entre ellos <Park Ji-yeon> o simplemente Jiyeon, cantante del famosísimo grupo de K-Pop “T-ara”; o bien ex miembros del grupo “Sugar” como <Hwang Jung-eum>. Esto a parte de darle una grandísima campaña de márketing a la peli y que ésta estuviera en el top durante mucho tiempo con las salas atestadas de fans, también es agradable ver cómo una chica cute cantando en un escenario puede desenvolverse tan bien en una película de terror. El contraste es brutal y no deja indiferente.

El apartado sonoro remata a una producción fantástica que desde ya recomiendo, no sin antes prestar especial atención tanto a los personajes como a los giros de la trama, puesto que Death Bell 2 antes que una película de terror, es una película de personajes.






Juego:: Kagero, deception 2

AÑO: 1998
CREADORES: TECMO JAPAN

























Debo decir que éste es el primer juego que he tenido el placer de probar dentro de la ya, extensa saga de entregas “Deception” y asimismo también puedo afirmar que ha sido un más que reconfortante inicio.


Lo siento pero no, no soporto los juegos de estrategia. Eso era lo que decía cuando algún conocido me hablaba de ellos o simplemente me invitaba aprobar alguno del género, no por nada, sino porque el que siempre me vendían era el “Age of Empires” y qué quieres que te diga, no lo soportaba. Ni cómo estaba hecho, ni su interfaz ni su objetivo; de hecho lo veía totalmente vacío y estúpido.
En estas que un día por youtube di con un vídeo de uno de mis youtubers favoritos (y que también es director de cine) recomendando un tal “Kagero, deception 2”. Su análisis me convenció y lo probé más que nada porque la idea del mismo y cómo me lo vendió esta vez sí, me atraía de cierta forma. Y así fue, me tuvo enganchado durante todo el tiempo y con ganas de seguir avanzando misión tras misión sin perder detalle de lo que sucedía.

Creo que por eso mismo le reconozco tanto mérito al juego de TECMO. Cómo se las ingenió para, a una persona que rechazaba el género de estrategia, terminara sucumbiendo al mismo y con ganas de seguir avanzando.

Hablando del juego creo que los dos pilares fundamentales son el juego en sí (colocar trampas de forma estratégica y precisa para acabar con los enemigos) y la historia densa que envuelve a lo anterior. Así es, no estamos ante un mero video juego cuyo fuerte sea poner trampas sádicas y combinarlas con otras en el tiempo preciso para aniquilar de la forma más salvaje a nuestros oponentes; sino que por primera vez (por lo menos con mi experiencia en este campo) queda justificado de buena forma bajo un desarrollo sentimental muy acertado de la chica protagonista y que a medida que vaya avanzando la trama, irá evolucionando a más que un sobresaliente drama en la que nosotros el jugador, nos veremos inmiscuidos contra nuestra voluntad. Ejemplo de ello puede ser si matamos o no a un simple abuelo que cuida de su nieto enfermo, o a una madre dolida por la muerte de su ignorante marido. ¿Haremos de jueces o de verdugos? ¿Seremos el bueno o el malo? Eso lo decidirás solamente tú y en consecuencia así avanzará el juego. Por ello vale tanto.

En cuanto al aspecto técnico sólo tengo una palabra, impecable. No soy de fijarme en los gráficos en cuanto a video juego antiguo se refiere, pero creo que están muy bien definidos y hasta bonitos. La banda sonora es maravillosa, cada misión tiene un track distinto que aporta un plus muy agradable y sin quererlo apoya al jugador. El diseño de niveles lo pondría de otra forma, ya que siempre estar jugando bajo el mismo techo por mucho tiempo llega a aburrir aunque por otro lado vas ganando experiencia (que nunca está de más).

Si hay algo que me gustaría verdaderamente cambiar serían los enemigos. Una vez que vas por la mitad ya te has visto a todos y los que se te presentan no son más que personajes reciclados a los que se les ha cambiado el color de la armadura o prendas y el nombre. Lo veo un punto débil para un juego tan bueno, la verdad. También apuntaría la casi nula capacidad de conversación que nuestro personaje tiene a lo largo de la historia, reduciéndose a simples ademanes de cabeza o meros “sí/no”. No afecta negativamente a lo que viene siendo el juego pero sí que bajo nuestro punto de vista puede resultar molesto.

En definitiva, un juegazo como tantos otros de la primera PlayStation y un diamante en bruto que merece mucho la pena pulir.


Muy recomendado,


28 oct 2016

Noriko's Dinner Table

AÑO: 2005
DIRECTOR: SION SONO






















Noriko’s Dinner Table, ¿la aspirina para el Suicide Club?


Como ya dije en mi crítica a Suicide Club, la obra del 2001 de Sono dividía opiniones; fans y detractores. Bueno, como en todas las películas, ¿verdad? Siempre va a ver gente a la que le gusta la película y otros a los que no, pero recordemos que nos encontrábamos delante de un bloque macizo y de difícil comprensión: El Club del Suicidio. Tanto revuelo ocasionó la cinta y mismamente, hubo tal colectivo a nivel particular como críticos y especialistas que no la llegaron a comprender del todo, que el bueno de Sion Sono realizó cuatros años más tarde, la que sería una precuela explicativa de la susodicha cinta.

Si bien es cierto que de alguna forma aclara ciertos aspectos o agujeros que dejaba a libre interpretación el primer filme, esto no quita ¡ni por asomo! que Noriko’s Dinner Table sea una película sencilla, amigable y de fácil digestión. Por no decir que vuelve la narrativa tan propia del cine japonés, endulzada con ese toque personal del cineasta. Para explicar la película el director tuvo la brillante idea (en el buen sentido) de hacer un ejemplo de 160 minutos, porque eso es lo que es Noriko’s, una gran ejemplo explicativo.

En este caso asistimos a una familia de clase media donde la hermana mayor se siente ignorada e incomprendida por sus padres, aunque sobre todo por su padre, el cual le prohíbe estudiar en la universidad de Tokio (donde la hija quiere cursar sus estudios, por el prestigio que tiene la facultad) por temor a que algún desgraciado embarace a su amada hija.

Esa es la premisa de arranque que se nos presenta y a partir de ahí la hija en un arrebato de rebeldía huye una noche de casa para encontrarse con un grupo de amigas que conoció en Internet… Los giros que pega la peli son cuanto menos, sorprendentes, y es que además la obre se divide en capítulos y cada uno narrado desde el punto de vista de los protagonistas. Esto aporta un plus al mismo sin ninguna intención planificada, volviéndola más y más interesante. De hecho es curiosa la evolución que sufre nuestra protagonista, Noriko <Kazue Fukiishi> a lo largo del film y que, ojo, se asemeja muchísimo (demasiado diría yo) a esa dual relación que ya estableció el artista en Suicide entre la chica y Shibusawa y el espectador; esto es, la compenetración de personaje de película-espectador. La misma técnica vuelve a poner en práctica y vuelve a funcionar, pues durante la primera hora uno se siente igual que Noriko: perdido, sin entender nada. Y no será hasta que avance la trama en otros personajes cuando ya uno se vaya enterando de por dónde iban los tiros e ídem Noriko.

Sin meterme mucho en materia puedo decir que la historia tiene una rica narrativa con un final demoledor para un padre <Ken Mitsuishi> (Ekusute) e hijas, pero sobretodo, la figura del padre es importantísima y todo lo que le sucede y realiza. Es una oda al esfuerzo, al amor por unas hijas que siente le abandonaron y también al dolor silencioso que tiene que soportar hasta el final. Es eso, una conclusión de los hechos que te deja sin aliento, no por el contenido explícito sino por la tensión tan realista que viven los personajes en media hora de metraje (sino menos).

Un drama con todas las de la ley que provoca sentimientos encontrados en el espectador sin buscarlo, y todo ello empapado por una magistral banda sonora compuesta por <Tomoki Hasegawa> quien ya participó en Jisatsu Circle y Ekusute. Las actuaciones sólo cabe decir que son espectaculares, por actores y actrices que simplemente, están a otro nivel.

Si se ve, recomiendo encarecidamente hacerlo con paciencia, tranquilidad y obvio, los seis sentidos puestos.



25 oct 2016

Death Bell

AÑO: 2008
DIRECTOR: Yoon Hong Seung






















-Clase, silencio por favor.
-…
-¡Mañana examen!
-!!!
-Mejor. Pues nada, deciros que dentro de poco van a llegar unos alumnos de intercambio extranjeros y que sólo pueden entablar conversación con ellos los mejores de todo el curso. Para ello vamos a realizar una pruebecita de nada en la que pondremos preguntas de todo tipo y los 20 con mejores notas serán los elegidos.
-Pero profesor, ¿por qué el examen?
-Lo pone el guión.


Ya se ve la gran coherencia con la que empieza la película, ¿verdad? En fin, a grandes rasgos no va más allá de mostrar a actores/actrices famosos de su generación en una película de terror (entre muchas comillas) y poco más. La trama gira entorno a ese grupo selecto de estudiantes que durante un finde se quedan en la escuela y tendrán que arreglárselas todos juntos para sobrevivir a un maníaco que los va secuestrando uno a uno y cuya única salvación reside en una serie de acertijos que el malo les plantea. Espera… ¿te suena esto a algo? Seguro que sí, SAW. Pues Death Bell es una fusión maltrecha de SAW con colegialas surcoreanas. Y digo lo de maltrecha porque la cinta tiene potencial, se le ve en su guión escrito por <Kim Eun-Kyeong>. Artista que personalmente me gusta mucho tras su debut con “Roommates” y que desde ya recomiendo verla.

Volviendo al tema decir que lo que falla es la dirección, hay algunas partes que están bien, incluso llegan al notable podría decirse; pero lastimosamente la gran mayoría del metraje no llega a cuajar. Por así decirlo… no es creíble ni el transcurso de los acontecimientos, ni las actuaciones de determinados personajes en determinadas situaciones a lo largo de la historia. No por la inutilidad de los estudiantes en su gran mayoría (que también) sino que además de una historia que se autodenomina slasher quiere implementar a fuerza de martillo y cincel la típica gwishin (yurei a la coreana) de alguna forma y esto… no le pega. Ojo, no digo que se llevase a cabo de mala forma, sino que para una trama con unos estándares tan definidos intentar innovar con algo tan arriesgado puede salir mal, y así es. El espectador llega un punto en que se pierde entre tanta absurda confusión, lío de nombres y objetivos no muy claros; cuando si no, los alumnos se la pegan dando vueltas de arriba para abajo por toda la macro escuela sin un plan objetivo.

Es verdad que ahora se me puede reprochar eso mismo con “oye, pero en la situación que viven nuestros personajes, el orden es lo que menos prevalece”. Cierto, muy cierto, pero la película se pasa de rosca para la poca importancia que el propio film le imprime a los asesinatos y consecuentemente la casi nula preocupación de los demás estudiantes por la muerte de sus compañeros.

Positivamente saco los efectos especiales que están muy logrados y los últimos 10-15 minutos. El film aprovecha aquí para tocar el tema del soborno lográndolo muy acertadamente y la última escena resulta muy memorable y hasta sentimental, llegando al corazón y que a mí me gustó mucho (tanto por lo bien que se montó, como por lo que transmite). Quitando eso sí, la toma final, ridícula.

En conclusión, el tráiler aparenta más de lo que hay, el póster aparenta más de lo que hay y “los buenos comentarios” aparentan más de lo que hay.

Inverosímil mediocridad, 4/10

P.D.: Como ya dije arriba, si quieres ver una peli de la misma índole y mejor hecha, te invito a ver “Roommates” aka “4 Horror Tales: D-Day”.

23 oct 2016

Exte: Hair Extensions

AÑO: 2007
DIRECTOR: SION SONO






















-Últimamente los pelos de mi nariz están un poco descontrolados.

-Creo que es por la suciedad del aire.

Ay ya empezamos Sono…


Quedando en parte algo desilusionado con el Club del Suicidio del director y viendo la más que notoria buena reputación del mismo, me lancé con otras expectativas hacia una de las obras más relevantes dentro de su filmografía: Ekusute.

Siempre me gusta ver entrevistas/making of’s o simples behind the scenes de las películas para poder contemplar esa otra cara de la misma moneda, la relación entre el staff. En una entrevista realizada por los del Festival Internacional de cine de Bruselas del 2008 Sono respondió a uno de ellos: “no es que piense en una película de terror y ya, simplemente vi la moda de las extensiones y me pareció adecuado para una película de terror”. Y es que muchas veces el terror más profundo se puede hallar en la más simple e inocente de las cotidianidades.

En esta ocasión se nos presenta el de las extensiones para el pelo, moda del 2000 entre las chicas y que aquí se critica y ridiculiza hasta el extremo, tornándose más una sátira social que una historia de terror. De hecho el único terror que aborda el film es el del cabello azabache y cómo a partir de un cadáver encontrado en un container va extendiendo el mal a donde quiera que vaya. Como vemos, se trata de otro escaparate, una carta de presentación bien hilada con lo que de verdad quiere mostrar el director: la crítica. De igual forma la rodó en Suicide Club y nuevamente repite la fórmula, esta vez centrándose en el abuso o maltrato infantil que desgraciadamente es una triste realidad diaria en Japón. Por no decir la magistral forma en la que aúna las dos temáticas sin que una se sobreponga sobre la otra o gane protagonismo. Me atrevería a decir que si a Exte le quitasen el personaje de Mami-chan <Miku Satô> y todo lo que representa, Ekusute no sería más que otra J-Horror del montón queriendo destacar.

Ya que ha salido el tema me gustaría subrayar que hay una gran variedad de cintas que de una forma u otra tratan el tema del maltrato a menores, ya sea por compañeros de clase o por los propios padres y que bueno…como todo en la vida o las cosas se hacen bien o no se hacen bien; y cuando no se hacen bien se nota. Sin embargo esta película da un golpe en la mesa y se hace notar bastante en una escena sin precedentes y que aparte de lo desgarradora que resulta para los personajes también provoca el “efecto rebote” en el espectador, sacándole esa rabia impotente a tomar parte de protagonismo en la toma. Para mí esa escena es la mejor de todo el film, 10/10.

Una investigación policial absurda que ya viene siendo marca de la casa, una chica que va saliendo adelante con su profesión de peluquera como puede <Chiaki Kuriyama> con su amiga de piso <Megumi Sato>, un enigma alrededor de un cadáver desaparecido y un malo que se ha equivocado de película <Ren Osugi> son los ingredientes que utiliza el cineasta para darnos otra vez más una obra no de tan difícil asimilación pero si con un doble sentido más que reconfortante utilizando su humor negro característico que no molesta para nada sino al revés y unos efectos especiales para hacerle una iglesia al de atrezzo.

Me he quedado flipando con la cantidad de pelo y lo bien utilizado que está, sus ya comentados efectos especiales y unos cameos de actores famosos, como <Yôji Tanaka>.

Una maravilla audiovisual que entre otras cosas se permite ya que estamos ¿por qué no? pensaría el artista, reírse de la cuarta pared; y un final que a mi parecer está al nivel de sus otras obras.

A masterpiece to watch,




22 oct 2016

Suicide Club

AÑO: 2001
DIRECTOR: SION SONO























¡¡CONTIENE SPOILERS!!


Una de las películas más icónicas, representativas y famosas del director, guionista y poeta Sion Sono es sin lugar a dudas “Suicide Club”. Obra cumbre en su carrera y primera producción con prestigio internacional (cabalgó durante años por festivales de todo el mundo) que ya adelantaba su peculiar forma de hacer cine.


Jisatsu Circle es de esas cintas cuya opinión se encuentra visiblemente dividida en dos bandos: los que la odian y/o no les gusta (porque básicamente no la han entendido/se esperaban otra cosa) y el grupo de residentes que les encanta por ser un distintivo bastante apetitoso al género y más en concreto, porque comprendieron el mensaje principal del film. Yo, una vez más padezco el síndrome del “tercer bando” como me he permitido auto-denominarlo y que aúna a aquellos espectadores que a expensas de haber entendido y comprendido la idea de la cinta, sencillamente, no les atrae. Así es, tengo que admitir la crítica que emana por los cuatro costados esta obra del prestigioso J-Cinema, pero en lo personal, pienso que se podría haber expuesto de una forma más directa y con menos complicaciones. Me explico:

¿Alguna vez has oído hablar de la expresión “No es el qué se dice, sino el cómo se dice”? Seguro que sí, y a pesar de que a priori no se le da mucha importancia, tiene más que la que creemos. Un ejemplo práctico podría ser la discusión de un tema algo peliagudo (o no) y tratarlo con serenidad y tranquilidad mientras te opones a él o, por otra parte, saltar irascible y furioso también, oponiéndote a él. Ojo, no confundir con “ser políticamente incorrecto”.

Veréis, con la explosión que provocó accidentalmente la Ringu de Hideo Nakata, la industria del cine español giró la cabeza por primera vez hacia ese continente tan lejano que era Japón y comenzó a importar obras suyas dentro de nuestras fronteras. Obviamente se trataban de películas de terror y a día de hoy, distribuidoras como “MediaTres Estudio” o “Selecta Visión” siguen trayéndonos a cuenta gotas más obras de ese país. Por otra parte no sé si os habréis dado cuenta o no, pero parece que esas compañías iniciadoras (no confundir con las citadas) no se tomaban muy en serio el tema de elegir películas y pillaban por los pelos aquellas que tenían una gran fama a nivel internacional; doblándolas de mala manera y publicitándolas como unas J-Horror Extremes… Cierto es que la gran mayoría eran filmes de terror, pero otras no, ¿adivináis ahora a quién me refiero? Exacto, a Suicide Club. Esta película es el perfecto ejemplo de cinta japonesa que con tener un escaparate aparentemente de “terror” ya se la etiquetaba, empaquetaba y exponía en las tiendas/videoclubs de todo el país como una horror movie. Porque vamos a ver, El Club del Suicidio NO es una película de TERROR. En absoluto.

Entonces si tenemos en cuenta los dos párrafos anteriores podemos entender el por qué de que el primer grupo que antes he nombrado tenga tantos adeptos, ¡se esperaban otra cosa a la que les vendieron!

Además y para más inri si cabe, estamos ante una producción que no se la puede criticar con sólo verla una vez y ya está. No porque yo lo diga, sino porque no se entera uno de nada. Quitando el segundo visionado que le eché, hay que empezar por mencionar el fundamento intrínseco de esta obra, ¿cuál es su objetivo? ¿Acaso Neon Genesis Evangelion es una acción llena de mechas dándose de ostias? No, ¿verdad? ¿Y entonces por qué tanta gente la odia? Pues porque no saben ir más allá, ahondar en el verdadero significado que está detrás de una estudiada y premeditada máscara.
Suicide Club NO es una película de terror, Suicide Club NO es una película de intriga y Suicide Club no es thriller; y no es ninguna de esas tres cosas porque no le interesa. De hecho son un mero recurso estilístico usado de vez en cuando, de aquella manera sin darle mucha importancia y haciendo ver que ¡oye! La peli no gira entorno a la investigación del detective y su ayudante (paralelamente Anno empleó la misma técnica de los mechas en su Evangelio). Entonces…¿Qué es El Club del Suicidio? ¿Qué qué es? Una crítica, una llamada de atención a la sociedad, un reclamo.

Otro tema a considerar es que en la época en la que se rodó la peli se sucedían muchos suicidios en Japón y de esta forma el cineasta lo aprovechó para incluirlo en su obra. ¿Os acordáis de esa escena en la que una chavalada se tira desde el balcón de una escuela? No la veis algo…¿rara? Como anti natural, ¿forzada tal vez? Otro motivo más para darse cuenta de las verdaderas intenciones del director. Pasa lo mismo con esa tarantiniana introducción.

Estamos ante una crítica en cubierta contra varios factores como es el de la falta de personalidad en los jóvenes y su fácil manipulación por las modas (el efecto Desert con sus canciones de doble sentido), la carencia de vida que un sujeto posee dentro de una sociedad estandarizada y bajo unas rutinas casi agobiantes (las tomas de las personas que iban en el metro lo dicen todo, la vida personal que nos es mostrada del detective encargado) y su posterior cura. Una cura basada en la autoreflexión del mundo que te rodea y ser consciente con uno mismo, llegando a formar un solo sujeto con todos los que te rodean. El stress, ajetreo o las prisas son elementos muy cotidianos en cualquier ciudad, pero en nuestro caso se acentúa si nos vamos al país del sol naciente.

A medida que avanza la película nos va mostrando diversas escenas con distintos propósitos igualmente sugerentes y reveladores. Cuando Kuroda se suicida delante de sus compañeros no lo hace porque sí, sino porque por fin comprende el significado de los suicidios: si no te ves capaz de ser uno solo con todos, no mereces vivir. Hay que saber apreciar la vida y además el suicidio es la muerte más popular en Japón, por delante de crímenes u otros delitos. Si te fijas antes de pegarse el tiro dice “ellos no son los culpables”. También observamos diversas escenas con cierto toque humorístico que son más una válvula de escape que otra cosa u otras bastante grotescas, como la de Génesis.

Entre todo este batiburrillo de trama aparece “Noriko” con un protagonismo casi secundario, pues el espectador pensaba que el detective iba a ser el prota de la función. La cosa es que, tanto Noriko como Shibusawa empiezan por el mismo camino; pero la chica descubre el núcleo de todo el entramado de suicidios diarios; hasta “enfrentarse” contra el jurado, uno presidido por críos, símbolo internacional de la pureza e inocencia.

Entonces con todo lo ya dicho el director programó el juego de tal forma que el espectador se familiarizase con uno de los dos, ¿entendiste bien el final de la película? ¿Por qué Noriko mira de esa forma al joven policía? Shibusawa sigue sin entender el mensaje de lo que le rodea, al igual que el grupo de incompetentes que trabajan en el caso; y es que a veces, los árboles no te dejan ver el bosque.



12 oct 2016

Ghost Theater

AÑO: 2015
DIRECTOR: HIDEO NAKATA






















Antes de nada, y cada vez que se presenta la ocasión, me gustaría agradecer a “ZukidoZ” el ZineClub que tuvimos sobre el debate y la charla de la película. ¡Gracias!


Muy bien, pues estamos ante lo que en reglas generales se podría considerar como el segundo remake de la obra original “Ghost Actress” aka “Joyû-rei” aka “Don’t Look Up”; film de 1996 dirigido por Hideo Nakata y que muchos la tienen en gran estima. Así es, el propio director parece que falto de ideas (tal vez) se propuso rediseñar la polvorienta historia del fantasma de teatro. Si a mí me preguntan sobre esto, pienso que el hecho de que un cineasta tenga que rodar un remake de una obra suya dice mucho, y no precisamente cosas buenas…y así es, la misma película lo dice todo.

Una joven, bella y prometedora actriz llamada Sara chan <Haruka Shimazaki> es “obligada” por su jefa de la agencia a que dé un paso adelante y apueste por ir más allá. Eligiendo como última opción el teatro y con una maldición de por medio, tendrá que ingeniárselas con ayuda de ¿un ayudante de realización? para desentrañar el misterio y asesinatos que asolan su lugar de trabajo.

El terror oriental desde hace unos años se está hundiendo y a pesar de que algunos títulos van saliendo cómo pueden del montón, en general la mediocridad y el ya, automatismo de copiar y pegar antiguas fórmulas de principios del milenio siguen desgraciadamente vigentes. “Ghost Actress” es una película más, otra entre sus iguales. Aun teniendo una atractiva idea, su desarrollo es su Talón de Aquiles. Sencillamente, fusionar “Ringu 0” con “Doll Master” y punto. Añades un poco de efectos especiales del HD que tanto se estila últimamente, tomas enteras recicladas de otras cintas y poco más la verdad.

Tenemos agujeros argumentales del estilo “¿y por qué van a tal lugar?” o “¿y por qué pasa eso?”; escenas que son un parón en la historia para SUPUESTAMENTE dar miedo o terror o lo que intente ya hacer la película… Después el papel de la policía resulta tan insignificante como parece ser ya en las cintas de terror y aquí se incrementa eso, teniendo únicamente a dos oficiales a cuál más inútil transmitiendo un nulo carisma o realismo. Hay cambios en el comportamiento de algunos personajes que rozan lo extraño y ya ni hablemos de las actuaciones. Vamos a ver, no son muy malas, pero cierto es que sobre todo en las partes donde están asustados, pues ponen caras de estar estreñidos los pobres. Eso sí, yo me he reído mucho con el director de la obra, y no precisamente por su personaje.

Siguiendo con lo comentado, también podría decir que la película aparte de estar mal hecha, se hizo sin ganas. Ejemplo de ello es el origen de la maldición de la muñeca, muy express y rápida para intentar convencer; unas muertes que no tienen ni justificación ni credibilidad y una matanza que se da por toda la cara donde yo ahora me la tengo que creer. Claro que sí.

En fin, un empacho de enfoques a las caras de las chicas excesivo, un terror del todo a 5 duros y unas gesticulaciones que ni pinchan ni cortan.


Poco más allá de la mediocridad olvidadiza, 


11 oct 2016

Confessions

AÑO: 2010
DIRECTOR: Tetsuya Nakashima






















La venganza es un plato que se sirve frío


Siendo sinceros es la primera película del director <Tetsuya Nakashima> que veo y por las sensaciones que me ha imprimido su Confessions, no será su última obra que vea. Yendo al grano la película es una de venganzas, pero claro tú le dices esto a un sujeto de a pie como tú o como yo y ya se está imaginando secuestros, explosiones, policías y demás americanadas de por medio, ¿verdad? Craso error, puesto que aparte de ser una producción del oriente más lejano (y todo lo que eso conlleva ya de entrada) se despega de cualquier posible idea que pudieras imaginarte mientras lees la sinopsis o ves un tráiler; y esto se incrementa cuando vas por el minuto 1 de recorrido y notas que bueno… ¿y las explosiones?

Una de las cosas que siempre tengo en cuenta a la hora de valorar una obra cinematográfica es su trama, el guión, ese hilo narrativo. ¿Es bueno? ¿Está bien hecho? ¿Sigue con lo que tenía planeado? En el caso que nos ataña lo mínimo que puedo decir es “genial”. Hacía ya mucho que no tenía el placer de ver un film con una historia de relación calidad-originalidad tan alta. No todo se lo debo a esos casi 15-20 minutos de un precioso, desgarrador y triste monólogo de la profesora Moriguchi <Takako Matsu> sino a todo el entramado, a ese majestuoso hilado de todas las confesiones que todos los protagonistas realizan, para cerrar por la puerta grande un arco en esencia, desolador. Ya cuando te estás viendo esa intro sabes que estás ante algo que no te esperabas, la cinta va lenta y seguirá yendo lenta porque para que una obra de arte quede bien, ha de realizarse lenta ya que es así como las cosas buenas salen. Me refiero a la arquitectura que tiene el film, es atípica. En verdad esto no supone ninguna novedad si nos damos cuenta, porque películas como la famosa “Ju-On” ya rompieron los moldes preestablecidos de cómo seguir un guión. Aquí Confessions reinventa el formato de las “revenge films” para darles otra tonalidad, sin violencia cada dos por tres, sin palabrotas fuertes cuya única intención sea provocar el “shock factor” en el espectador y sin un guión dirigido a un público infantil. No. Confessions va mucho más allá, destacando escenas muy importantes con pasajes que transmiten las mismas emociones que estás viendo, utilizando el recurso de la cámara lenta como algo más allá que mostrar unos simples disparos. Es decir, que lo que hizo que Confessions ganara los premios que ganó y arrasara como arrasó se debía fundamentalmente a su NARRATIVA. No es el qué dices, sino el cómo lo dices; ¿no te suena de algo? Pues en el cine pasa tres cuartos de lo mismo, si tú sumas una historia que reinventa un género con una buena dirección y con buenos/curiosos detalles te da de resultado un peliculón de cinco estrellas michelín. Mira, otro ejemplo, “Cure” de <Kiyoshi Kurosawa> teníamos una historia que desmontaba el género de los thrillers de policías, tenía buena dirección y además se le otorgaba una pincelada de originalidad y detallismo propio del cineasta.

Volviendo al tema, esta cinta de Nakashima tiene los tres ingredientes claves y además los utiliza por igual, que es lo mejor de todo. Referente a las secuencias de “slow-motion” tenemos diversas que transmiten distintos sentimientos, tanto los del protagonista como los que quiere sacarle al espectador.

En cuanto al apartado técnico rematar los efectos especiales y digitales, los cuales creo que saltan a la vista lo bien conseguidos que están (sangre, explosiones, la lluvia, etc), la música que gana una notoria relevancia y de muy importante peso; y las actuaciones como antes dije.

Pero en fin, yo es lo que siempre digo: una pintura no se dice que está muy bien hecha porque es bonita (que también), sino porque el pintor la hizo con ganas, con entusiasmo, con amor propio. Amaba lo que estaba haciendo y por eso le quedó de esa forma tan espectacular. Con la peli esto es equivalente, se podía haber hecho una obra de la misma envergadura pero me apuesto lo que sea a que no llegaría al nivel de Confessions, ¿y por qué? Porque Confessions se hizo con amor. Las cosas o se hacen bien, o no se hacen.



10 oct 2016

License To Live

AÑO: 1998
DIRECTOR: Kiyoshi Kurosawa






















Desde que el director realizase en 1997 su obra magna “Cure” y hasta algunas cintas posteriores que son en su gran mayoría conocidas (Charisma, Séance), rodó una serie de filmes desconocidos por la gente (el dúo vengativo de Eyes of the Spider y Serpent’s Path, los Gakko no Kaidan, su serie de yakuzas con Shô Aikawa, etc) y precisamente “License To Live” es otra de esas. Kiyoshi Kurosawa como ya él mismo admitió en varias entrevistas, no quiere que le identifiquen como un artista del cine de horror japonés, ya que también realiza incursiones en otros géneros. Esto lo vimos en sus pinkus (Kandagawa y la Chica DoReMiFa), las vengativas anteriormente citadas y ahora le toca el turno a la comedia. Pero claro, como ya se sabe el cineasta no sólo va a rodar una comedia, sino que también desmontará el género implementándole otros como en este caso, el drama. De hecho, “Permiso Para Vivir” se podría autodenominar como una triste comedia dramática.

El filme sigue la evolución de un chaval de 24 que recién se despierta de un coma de 10 años, lo que podría decirse comúnmente como “re nacer”, ¿no? Pero como ya le advirtió su médico, “el mundo que conocerás no será como lo recuerdas”. Sabias palabras. Pues es lo que pasa.

El joven, llamado Yoshii e interpretado por <Hidetoshi Nishijima> tiene que afrontar desde la mente de un crío pre adolescente el mundo de los adultos (siendo el eje de la película) comenzando por la delicada situación de su familia, su relación con el amigo de su padre Fujimori <Kôji Yakusho> o sus antiguos amigos del instituto. Todo ello desde el punto de vista del protagonista, el cual mantiene una actitud bastante pasota de lo que le rodea y que yo, la primera vez que vi la peli no entendí, pero luego sí: a veces es mejor no inmiscuirse demasiado para no salir herido. Esta filosofía que en algunas ocasiones puede resultar molesta, inverosímil o hasta cómica, es vital para no sólo el prota sino para todos los personajes.

La relación e historias de todo el elenco de personajes me ha parecido muy bien dirigida y relacionada, sin olvidarse de ninguno y utilizándolos de una forma en la que marquen a nuestro joven en cuerpo de adulto en mayor o menor medida. En lo personal valoro con creces la actuación de Yoshii a lo largo de todo el metraje, puesto que yo en su lugar no sabría qué hacer o decir con semejante escenario que se topa.

Dentro del ya citado cast tenemos una baraja entera de actores que o son/serán marca de la casa o son bastante famosos: Shô Aikawa (Eyes of the Spider, Serpent’s Path), Taro Suwa (Ju-On), Shun Sugata (Marebito, Kill Bill), Kumiko Asou (Kairo), Ren Osugi (Eyes of the Spider, The guard from Underground, Charisma) o Masahiro Toda (Cure). Sorprendente cuanto menos y que para realizar una obra de este estilo curioso ver por ejemplo a Aikawa en un papel de secundario con un personaje atípico o a Asou con otros ojos distintos a la apocalíptica Kairo.

Por lo demás decir que la música y juegos de la cámara resultan los típicos de esa era del director, época en la que no paraba de sacar películas una detrás de otra y siempre de gran calidad.

En verdad, cuando terminas de ver License To Live sabes que ha habido partes que no has pillado porque es la misión del director también, cuestionar algunas escenas y crear la duda en el espectador, pero bueno, tampoco para tanto.

Al principio he dicho que es una comedia, ¿verdad? Me gustaría sacar este tema puesto que el humor que utiliza es una mezcla de ese humor graciosillo que antes molaba pero ya no, con ese del que te ríes por pena, no porque sea malo, sino por los personajes que lo sufren. Me he reído, me he conmocionado y me he extrañado; un aluvión de sensaciones que sabe sacar siempre un buen cineasta.


2 oct 2016

Trick 1 (Serie)

AÑO: 2000
DIRECTORES: Yukihiko Tsutsumi, Katsuya Korenaga, Hitoshi One, Hirashi Kimura






















Antes de empezar la crítica, me gustaría agradecer al usuario “acerswap” por recomendarme esta serie, ¡muchas gracias!


Cuando vi que la serie era una mezcla entre suspense y comedia me esperaba lo peor, ya que como por todos es conocido, el humor japonés o es del bueno y te hace reírte sin parar, o resulta una patada en los huevos. Afortunadamente estaba equivocado. La serie como cualquier famosilla que uno conozca, empezó como un pequeño y humilde proyecto experimental entre Yukihiko Tsutsumi y la compañía productora, “TV Asashi”. Y como también viene siendo novedad, ambos no se esperaban la fama, méritos y reconocimientos que más tarde iría recolectando la serie, eso sí, en Japón, ya que fuera de las fronteras orientales, sólo los puestos en el tema dan con ella. De hecho, fue gracias a esta serie donde la guapísima actriz <Yukie Nakama> interpretando a “Naoko Yamada” y el apuesto <Hiroshi Abe> como “Jiro Ueda” saltaron a la fama.

La serie a grandes rasgos nos muestra cómo una joven maga y un futuro profesor de universidad se unen para resolver casos y/o misterios (y demostrar sus trucos usando la ciencia y la razón) donde los antagonistas están envueltos en un halo de magia y hechicería. Al igual que en “Expediente X” (la serie toma muchas cosas de ella), veremos también los problemas personales del dúo protagonista y cómo se las ingenian el uno con el otro para cada caso que se les “encomienda”. Quitando a un lado la temática del dorama y cómo está hecha, sino fuera por la arquitectura y psicología de estos dos personajes centrales, muy seguramente Trick no tendría la fama ni la calidad que tiene, seguro. No sé si fue aposta o no, pero para los creadores les supuso un pelotazo entregarles el papel protagonista a Yukie y Hiroshi.

Por tanto las actuaciones decir que están muy pero que muy bien conseguidas, y vale que sea de comedia y de tal forma, sea más fácil actuar en un rol determinado, pero las ganas y el esfuerzo personal es algo que no todo el mundo puede imprimirle. Aunque personalmente me gusta más el personaje de Ueda, la chica no se queda atrás en ningún momento, ambos sincronizados.

También resulta curioso el concepto que utiliza la serie: magia. Tachado de falsedad y engaño desde hace siglos, se personifica otra vez más en 12 entretenidísimos episodios donde el espectador normal y corriente se lo pasará pipa mientras descubre los entresijos y mecanismos escondidos en los, a primera instancia, verdaderos trucos fantástico y milagrosos. Esto es lo mejor de la serie, el cómo puede jugar con el espectador un simple espectáculo para niños y ver el trasfondo más allá que tiene.

Con todo ello nos queda el opening y el ending, preciosos ambos. Poco más que añadir de una serie perfecta para desconectar de un estresante y agobiante día.



Serpent's Path

AÑO: 1998
DIRECTOR: Kiyoshi Kurosawa






















Algunos dicen que es una secuela, otros que una precuela, pero no es así. La historia se remonta a mucho antes, cuando a principios de los noventas, el director realizó una serie de películas sobre yakuzas llamada “Suit Yourself or Shoot Yourself” y que con “Eyes of the Spider” culminaría (aunque ésta no tenga nada que ver sobre los yakuzas, ni tampoco “Cure”).


La historia de Serpent’s Path va sobre un yakuza de bajo rango (Miyashita) que busca vengarse por la tortura, violación y posterior grabación en vídeo de su hija pequeña y para ello contrata a un aparentemente inocente y tranquilo profesor de matemáticas (Niijima). Como es típico del cineasta, desmonta un género clicheado y lo reconstruye con su toque personal. Como ya se vio en “Eyes of the Spider” la idea principal es la venganza y cómo va degenerando al ser humano en su fin de tomarse la justicia por su mano; la violencia engendra más violencia. Pero lo que le da un toque distinto de “su película hermana” es que aquí asistimos a otro tipo de reconstrucción en el género. Digamos que Eyes of the Spider es más fácil de asimilar que Serpent’s Path, y si ya te costó asimilar ciertas cosas en la primera, en esta segunda ni te cuento.

PARTE EXPLICATIVA CON SPOILER

Miyashita (el padre de la chiquilla torturada) no es protagonista de la historia, sino el profesor. Un personaje cuanto menos extraño, ya que no cuadra con el tipo de personaje que interpreta y he aquí la gracia del asunto. Vemos como toma las riendas en todas las situaciones y que sin desearlo va a tener que intervenir y hacer el trabajo que supuestamente tendría que hacer el padre afectado. Ya harto de la inutilidad de Miyashita de intentar buscar al verdadero asesino, idea un plan para matar a todos los yakuzas de la misma banda en un mismo lugar, la nave abandonada. Quedándole solo a Miyashita, lo encadena como a los anteriores y le saca la verdad: el padre también estaba metido en el tema de su hija. Esto rompe a Nijima por completo (curioso que el actor tenga el mismo nombre que en Eyes of the Spider) y abandona al yakuza dejándolo a su suerte y pagándole con su propia medicina.
Esto es la película a grandes rasgos, pero el final es donde radica todo. Un flashback a un año antes de lo ocurrido donde una pequeña conversación entre Nijima y Miyashita confunde a este último y también al espectador… ¿qué significa? ¿Qué nos quiere decir? Bueno, puede ser una apología idealizada del cielo, donde Miyashita por fin comprende todo lo que ha pasado cuando se para a estudiar los signos matemáticos; así es cómo yo lo entiendo.

FIN DE LA EXPLICACIÓN

Dentro del cast tenemos ya actores que podría decirse, amigos del director como <Shô Aikawa> en el papel de Nijima y que trabajó en la saga yakuza antes comentada; <Teruyuki Kagawa> que aún a día de hoy sigue con el director (Creepy); <Yûrei Yanagi> conocido por “Ghost Actress” y otros trabajos iniciales de otros directores; y <Hua Rong Weng>. Soberbias actuaciones sin queja alguna.

El resto del apartado técnico podríamos etiquetarlo a estas alturas como de “la marca Kurosawa del V-Cinema”. Seguimos con esos enfoques largos y alejados que muestran más y dan sensación de gigantismo, una ambientación aséptica y fría y una música bastante escasa que actúa más de adorno.

Personalmente me sorprendió que entre el poco público que vio el filme, la gran mayoría la tenga entre sus favoritas y como uno de los mejores trabajos del cineasta. A ver, admito que está muy bien hecha y demás, pero a mí poco más del pasable no llega.