Voy por la cuarta parte ya y esto no mejora ni a la de tres, a medida que se suceden las entregas, “Noche de Paz, Noche de Muerte” arroja descaradamente por la borda la idea de convertirse en una saga de renombre haciendo películas buenas de “X-Mas Horror” para llegar a convertirse en navidañadas repulsivas o ya que nos colocamos en la cuarta entrega, películas que no tienen nada que ver con la onda general de la saga.
Y es que esto no es nuevo, ¡ni mucho menos! Sagas de terror más conocidas, como “Halloween” ya lo aplicaron a su franquicia con aquella estúpida tercera entrega que nunca debió existir. Comercialmente se recurre a esto cuando se está viendo que las cintas de una determinada saga van de mal en peor (lo que le sucede precisamente a ésta) y así, intentar cambiar el rumbo e izar velas hacia un nuevo destino más brillante y exitoso en ventas/público.
Pero en “Silent Night, Deadly Night” no sucede esto, todo lo contrario, vamos cuesta abajo y sin frenos.
El guión sigue los pasos de un thriller con tintes a “terror botánico/asquerosidades diversas con insectos” para darle mayor horror al asunto. De hecho lo único bueno que le saco a este largometraje son los buenos efectos especiales de antaño que utiliza para recrear a los bichos y la suciedad en determinadas escenas.
Lo malo es la forma en la que se lleva esto, nunca llegó a convencerme del todo, provocándome un terrible aburrimiento y pesadez que hasta por momentos se me cerraban los ojos. Apoyo la idea de las sectas satánicas y tal en un filme, pero la de aquí me resultó de lo más insulsa y sosa posible, utilizando prácticas un tanto extravagantes y “voluminosas”.
Por momentos se vuelve un tanto predecible y por otros de lo más bizarra, pero nunca me llegó a atraer. Personalmente “Ritos Satánicos” es una de esas películas que no te importan para nada y en ocasiones dejas de prestarle atención involuntariamente.
De las de “ver y se te olvidan a los días de lo malas que son”. Un 1
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