¡¡Contiene spoilers!!
Tengo que admitir que salí del cine muy contento. Personalmente no le encuentro ningún fallo y aunque no le pondré un 10 (por gustos) expondré las razones del por qué recomendaría a cualquiera que se viera esta octava cinta de Quentin Tarantino.
>La trama: en pocas palabras es un “auténtico plot-twist” coordinado con una fabulosa narrativa que dependiendo de cómo seas te puede gustar y atrapar o aburrirte, cuestión de cada uno. El guión a parte de lo original que es, te enseña a no fiarte de las apariencias, de lo que dice ser cada uno y que los pequeños detalles pueden desenmascarar al más cauto. Y qué mejor ambiente que un lugar cerrado en medio de la nada con asesinos, bandidos y depravados, como sus integrantes.
A parte de eso y el motivo por el que me encantó la peli fue porque te hace pensar, hace que le prestes atención. Analizando los personajes que te muestran en pantalla, fijándote en lo que hace, dicen y cómo se comportan. Aunque si te despistas (lo cual es extraño) ese narrador de tercera persona te explicará el final para salir de dudas. Pero vamos, como reto mental, de 10.
>Cast. ¿Qué tenemos por aquí? Samuel L. Jackson (el faker, por cierto), Kurt Russell o Michael Madsen son algunos de los actores principales que encontramos, siendo algunos típicos en las obras del director. Actuaciones bestiales y una compostura perfecta para este reparto de la 3ª edad que sigue imponiéndose igual de bien que en sus primeras apariciones (Pulp Fiction, La Cosa, Kill Bill respectivamente).
>”Ambientación”: El director de música no es otro que el gran Morricone, cuya BSO de “La Cosa” de Carpenter se convirtió en un clásico y que aquí lo vuelve a hacer. Un compositor que transforma cualquier situación en una epicidad por lo que si ya lo mezclamos con esas escenas tarantinianas nos quedamos con la boca abierta.
La cámara no se queda atrás. Y es que se toma su tiempo, al principio mostrándote unos planos lentamente para después dar paso a nuestra aventura o transformarse en una cámara lenta cuando lo precisa.
A modo de curiosidad, “Los odiosos ocho” es un remake encubierta de la ya citada película “LA Cosa” de John Carpenter. Una historia que sin el virus es casi parecido, en un lugar nevado, unos personajes enfrentados entre sí y con la desconfianza de por medio, el mismo director de música…No es de extrañar que Tarantino se fijara en ella, sabiendo lo fan que es de algunas cosas del cine antiguo y que aquí plasma en forma de “western”.
Poco más que decir de una película que me dejó anonadado recién salido de la sala.
Un 8
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