Christmas Evil

Christmas Evil (1980). Dir: Lewis Jackson


















¡¡Contiene spoilers!!

Película un tanto desconocida en lo que se trata al “X-Mas Horror” y es totalmente comprensible ya que mientras la ves supone un aburrimiento de proporciones acojonantes, incongruencias de guión garrafales que cantan un cutre intento de plagio a otras de su campo, y un patoso humor negro que ni corta ni pincha.

La película resulta mala, mediocre y bastante, BASTANTE olvidable. Aún con un título que como mínimo hace curiosear en ella y con una sinopsis que prometía un tanto, este film resulta un mejunje mal preparado donde se mezclan sin ningún orden o lógica elementos como el típico trauma infantil del asesino o la depravación de un adulto hacia la atracción de menores.
Para empezar nos centraremos en el trauma del “asesino” cuando es joven y cómo evoluciona con él a medida que pasan los años. Si cuando eres pequeño y pillas a Papá Noel liándose con tu madre en el salón no por eso agarras el trauma de tu vida, esto es una gilipollez. Es como si por haber suspendido tu primer examen coges una depresión de toro, pues no. Lo que no se puede hacer es fabricar a la carrera y sin ninguna calidad un elemento que haga de “detonante” y que sirva de excusa para presentarnos el protagonista descerebrado por toda la cara.
De igual forma su comportamiento cuando es adulto no tiene nada que ver con ese estúpido “””””””TRAUMA””””””” ya que:
>Adora a Santa Claus como si fuera un dios y le encanta la navidad más que a un chico de 8 años, y esto es absolutamente incongruente ya que Santa fue su trauma, ergo ¿por qué carajos te disfrazas como él? ¿No deberías repudiarlo? Menos mal que “Noche de Paz, Noche de Muerte (1984)” se toma esto más en serio.
>Nos presentan a un fracaso intento de pedófilo depravado que tiene una manía enfermiza por clasificar y escribir sobre los niños de la barriada en la que vive. ¿A qué viene esto? ¿Alguien puede explicarlo? De lo más lamentable.

Por si no fuera poco su fijación por la devoción divina a Papá Noel y dejándose manipular por sus compañeros de trabajo que lo tratan de pringado de carrera, el día de Nochebuena y el siguiente va impartiendo “justicia” a todos aquellos que le cagaron y premiando a los buenos.
Esto podría ser el punto fuerte de la cinta si no fuera porque le quitaron un posible uso de la violencia explícita (el cual le hubiera sentido de fábula) y del gore (que nunca está de más) para sustituirlo por unas penosas e irrisoiras muertes a cual más patética y peor montada que la anterior.
Es cierto que también tiene sus momentos dulces y cariñosos pero ¡NO PEGAN AQUÍ! Los gremlins es una obra destinada al “entretenimiento en familia” y tiene mejores escenas de suspense y terror que lo que pueda llegar a intentar mostrarte esta, sólo con eso, ya te puedes hacer una idea.

Otra cosa que también cae por su peso son las actuaciones, de lo más irreales y falsas del planeta, el único que se salva es nuestro protagonista bipolar (que por cierto, el traje de Santa le queda muy bien) haciendo las delicias del filme. El principio ya nos muestra la cero expresividad en el rostro del chico cuando pilla a su madre con Papá Noel, como si estuviera viendo pasar los coches por la calle, lo mismo; que menos que impactarte YA QUE SUPUESTAMENTE ES EL ORIGEN DE TU TRAUMA.
Este tipo de fallos es a lo que me refería, ¿ven?

El final me pareció simplemente una mierda, pero claro, si estás tan loco como nuestro prota pues te puede hasta gustar.

No la recomiendo ni para darle una oportunidad, ya que hay otras mejores y más antiguas películas a esta producción que merecen más la pena, como “Navidades Negras (1974)”.

2/10

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